"Tenemos que hablar de Kevin", película no recomendada para madres primerizas
“Tenemos que hablar de Kevin” (We
need to talk About Kevin) trata, principalmente, la relación de una madre con
su hijo. Pero en esta historia, los problemas que surgen en dicha relación van
mucho más allá de las clásicas disputas entre progenitor y vástago.
El Kevin al que hace referente el título, es un niño que en principio
parece normal, pero según van pasando los años, su desarrollo psicológico y
emocional dista bastante de ser el de un niño común. Con apetencia por la
crueldad, el pequeño Kevin comienza a convertir la vida de su madre en una
auténtica pesadilla.
Con este argumento, esta es una película que me ha recordado bastante a
“Joshua” (aquí absurdamente titulada “El hijo del mal”), en la que un niño de
apariencia angelical y cociente intelectual extraordinario (vamos, el deseo de
todo padre y madre), comenzaba a comportarse de manera inusual, desarrollando
(al igual que Kevin) un gusto inquietante por hacer sufrir a los demás.
Lo que me gusta de esta clase de películas es que, aunque estos niños
puedan parecerse bastante a la mítica encarnación del hijo de Satanás
(recordado por todos como el pequeño Damien de “La profecía”), en estos casos
el origen de su trastorno dista mucho de ser sobrenatural y se centra más en un
aspecto puramente psicológico. Y es que, ¿y si resulta que criando a nuestro
hijo, estamos criando a un psicópata en potencia? Precisamente, estas películas
siembran ese tipo de inquietud en el espectador.
Volviendo con “Tenemos que hablar de Kevin”, comentaré que me han encantado
las actuaciones tanto de Tilda Swinton (en el papel de la madre) y de los
varios actores que han interpretado a Kevin a lo largo de la película durante
su crecimiento.
En cuanto al montaje de la película, según empecé a verla me resultó un
tanto confuso, puesto que no es una narración lineal, sino que van saltando
flashbacks que nos hacen descubrir cómo ha llegado la protagonista a cierta
situación (revelada poco a poco a lo lardo del film).
También avisaré de que hay escenas realmente impactantes, pero del todo
necesarias para el desarrollo de la historia. Sinceramente, la película te deja
con un sabor de boca muy amargo, con mal cuerpo, pero con la sensación de haber
visto una buena película, y no el típico dramón de los domingos por la tarde.
Y, para acabar esta crítica, haré mención de la escena más sobrecogedora de
la película, con lo cual...
ALERTA SPOILER!!
Y bien, para mí, la escena más sobrecogedora es en la que la madre
encuentra los cuerpos de su marido y su hija en el jardín, cuando ese
intrigante sonido de aspersor que hemos oído en ocasiones durante la película
acaba cobrando sentido.
FIN DEL SPOILER
LO MEJOR: El duelo interpretativo entre Tilda Swinton y Ezra Miller, además de la escena que he comentado anteriormente.
LO PEOR: Sobra un poco de metraje.
NOTA: 9/10
Una película que si que recomendaría pero que no me gusto tanto como a ti, principalmente por dos motivos. El primero el montaje que si bien esta justificada su estructuración abusa y se pasa tres pueblos por todos lados y segundo por que no puedo evitar pensar que la propia directora trata de quedar de intelectual en las formas de realizar la película cuando realmente es mas simple que el mecanismo de un sonajero y lo poco que cuenta ya se deduce a los 10 minutos, Aun así no me arrepiento de haberla visto.
ResponderEliminarEs cierto que es una historia simple, pero precisamente por eso yo sí que veo necesario enredar un poco las cosas. En mi opinión, el propio montaje es la marca de la película y, aunque es cierto que intuyes el final desde bastante antes de que suceda (a través de esa especie de "flash forwards" que nos van mostrando), la verdad es que eso mismo crea más desesperación. Ves que algo malo se aproxima, incluso vas teniendo una idea concreta de lo que va a pasar, pero aún así sigues sentado/a, observando como ese pequeñajo crece y su madre no puede hacer nada por impedir que se transforme en un monstruo. Es exactamente la misma situación que vive Tilda Swinton en la película, sabe desde el principio que algo no está bien con su hijo, pero no se ve capaz de interceder en su destino.
ResponderEliminarA lo mejor ahora soy yo la que suena a querer quedar de intelectual, pero es lo que me parece xD